**Carlos Vogeler**, secretario adjunto y director para las Américas de la Organización Mundial del Turismo (OMT), declaró la semana pasada que México tenía que hacer un esfuerzo adicional para cambiar la percepción de inseguridad que sigue existiendo entre los viajeros.
En realidad, no es el único país que enfrenta ese reto en la región, y allí hay que mencionar casos como los de Jamaica y Brasil.
Pero éstos no son los únicos problemas comunes en la zona y la OMT tiene identificados los principales para América Latina y el Caribe, si es que pretende seguir creciendo a un ritmo más acelerado en materia turística.
Los principales desafíos para el turismo en la que denomina como “Las Américas”, son los siguientes:
1. Desarrollo de infraestructura y facilitación de viajes. Un aspecto en el que México ha avanzado de manera sobresaliente durante los últimos 15 años con el desarrollo de una red carretera importante, aunque en un país tan grande sigue habiendo pendientes, como es la conexión de Los Altos de Chiapas con Palenque y de Oaxaca con Huatulco, por mencionar sólo dos ejemplos.
2. La interconectividad aérea. También México lleva allí avances y hoy vemos una competencia creciente e importantes proyectos como el nuevo aeropuerto internacional de la Ciudad de México.
3. La gobernanza y la coordinación entre gobiernos nacionales, regionales y locales.
Allí la agenda es muy extensa, desde temas puntuales como la falta de coordinación entre las estrategias de promoción turística federal y la que hacen o no diversos estados de la República; hasta los actos de autoridad en que incurren los municipios en contra de las leyes generales.
4. La atracción de inversiones. Aunque la Secretaría de Turismo tiene una nueva dirección al respecto y el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) actúa en el mismo sentido, desde aquel programa de los swaps, cuando **Pedro Aspe** fue secretario de Hacienda, no ha habido otro con ese grado de efectividad.
5. La eficiente asociación público-privada.
6. El desarrollo de productos innovadores. Hoy parece que los grandes temas son el gastronómico y el cultural, pero siguen siendo una mera posibilidad.
7. La imagen de marca país. Un aspecto en donde el Consejo de Promoción Turística ha hecho un trabajo sobresaliente a nivel de la región.
8. La calidad y la competitividad incluidos los precios. En México están muy dispares, pues si bien hay destinos altamente desarrollados en estos temas, otros muchos quedan a deber.
Y sobre el tema de los precios, sobre todo hacia afuera, la gran determinante sigue siendo los tipos de cambio.
9. La capacitación de capital humano. Otro factor en donde México no alcanza las mejores calificaciones, partiendo de su deficiente sistema educativo.
Muy significativo, por un lado, que **Vogeler** destaque, entre todos estos asuntos, el aspecto de la percepción de inseguridad, que no corresponde con la realidad del país.
Al final, México parece no estar en la peor posición, pero sin duda hay un largo camino de mucho esfuerzo por andar, pues sería muy poco visionario conformarse con aquello de que “en tierra de ciegos, el tuerto es rey”.
