La noche de ayer, subsecretario Hugo López-Gatell presentó su reporte: 3,844 casos confirmados y 233 muertes en todo México. Y en el mundo, ya son más de 100 mil muertes y los casos detectados ya superan el millón 700 mil.
Mientras que este lado del mundo, en occidente, los números de casos van en aumento, en Asia, principalmente en China, los casos disminuyen día con día. Además de que el pasado 8 de abril, Wuhan terminó la cuarentena obligatoria y dejó salir y entrar a los cientos de ciudadanos.
Ante ello, Armando Flores, es un mexicano que vive en Shanghai y en entrevista nos comentó algunas lecciones básicas que debemos de hacer para salir de esta situación pronto.
Hacer caso a la cuarentena, aunque no sea obligatoria
En Shanghai no hubo cuarentena obligatoria (solamente en Wuhan) pero sí recomendaban no salir y estuvimos así por casi un mes. Aquí, sí nos dijeron que nos quedemos en casa pero la diferencia es que aquí todos escuchan lo que dice el gobierno. Vino desde el gobierno la orden pero todo es centralizado a diferencia de México y el resto del mundo que cada estado tiene cierta autonomía.
La cultura del ahorro
Lo que también es cierto que en México y otros países, especialmente latinos, la gente vive al día pues no hay cultura del ahorro. En China, la gente ahorra mucho más entonces obviamente no salir a trabajar aquí también les afecta pero hay más gente con ahorros para emergencias a diferencia de México. Eso es algo cultural pero que también tiene un impacto en cómo uno actúa en situaciones.
Usar cubrebocas
El uso de cubrebocas aquí es indispensable. Parece que solamente en Asia (China, Hong Kong, Japón, sudeste asiático, etc) lo usamos todo el tiempo pero en Europa, EU y México muy poca gente e incluso piden que no lo usen. Acá uno se siente raro si no lo usa pues se siente incluso medio desprotegido pero también hay que entender que prácticamente toda la producción de cubrebocas se hace aquí en China.
Hasta ahora, el gobierno en México implementó la cuarentena, recomendando a los ciudadanos no salir de sus hogares, y solo hacerlo cuando sea necesario.