Cada vuelo para turismo espacial emite tanto CO2 como una persona en toda su vida
Cada viaje que se realiza como turismo espacial por parte de Blue Origin o Virgin Galactic, contamina como mil millones de personas.
De acuerdo con el Informe de Desigualdad Mundial 2022, los viajes hechos por estas empresas emiten tanto CO2 como una persona en toda su vida.
Incluso, cualquier lanzamiento espacial contamina de esa forma, pero el informe señala que se compensa por las exploraciones.
Asimismo, el documento indica que la contaminación extrema asociada a la desigualdad de la riqueza se refuerza con el turismo espacial.
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Un vuelo suborbital de apenas 11 minutos emite cerca de 75 toneladas de carbono por pasajero, mientras que mil millones de personas emiten una tonelada al año.
A lo largo de toda su vida, esos mil millones de individuos no emiten más de 75 toneladas de contaminación por persona.
Aunque el estudio no hace referencia directa a las empresas de Jeff Besos y Richard Brandson, se refiere a viajes espaciales de 11 minutos.
Sin embargo, como algunos expertos señalan, aunque las naves de Blue Origin no emiten CO2 como tal, su fabricación sí lo hace.
La nueva era de turismo espacial abrió diversos debates como la desigualdad económica y el costo de experiencias para el medioambiente.
Como reacción ante estos viajes, se propuso establecer un impuesto especial para este tipo de actividades en Estados Unidos.
Esta propuesta de ley plantea que todos los que viajen al espacio sin fines científicos deben pagar un impuesto especial por ello.
