El gobierno de Argentina anunció la reducción en un 30% de los vuelos internacionales al Aeropuerto Internacional de Ezeiza y el aeropuerto de San Fernando, en Buenos Aires, esto como una medida para contener la segunda ola de contagios por covid-19.
Si bien el gobierno argumentó que “la temporada de verano va a continuar”, esta se realizará con más restricciones para su ingreso y su salida; en ese sentido, las precauciones se extenderán hasta el 31 de enero.
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“Es una temporada diferente, pero es muy importante que pudimos iniciarla el 1 de diciembre y vamos a continuar. Es importante saber cuántos turistas hay en cada destino y conocer la cantidad de contagios que se producen en esos lugares”, comentó Matías Lammens, ministro de Turismo y Deportes.
Entre las acciones el gobierno informó que todo aquel que ingrese a Argentina deberá presentar un test de PCR negativo, y posteriormente, realizar una cuarentena obligatoria de siete días.
A la par de ello, la Dirección Nacional de Migraciones (DNM) y la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), así como autoridades del sector salud, llevarán a cabo un cronograma sobre los viajeros que arriban a la nación, especialmente de vuelos provenientes de Europa y Estados Unidos.
Cabe señalar que Argentina confirmó la continuidad de la suspensión de llegadas y salidas procedentes del Reino Unido.
Con información obtenida de la alianza con A21
