Londres. Como en política los espacios se llenan, otro tema a resolver en la manera en que el gobierno lleva el turismo es cómo evitar que se pierdan definitivamente los espacios que México había ganado en los organismos internacionales más importantes.
Una situación que nuevamente se hizo patente esta semana en el World Travel Market de Londres, feria de turismo que no sólo es relevante por su alto nivel de negocios sino por los eventos paralelos que se realizan allí.
La reunión de ministros de la Organización Mundial de Turismo (OMT), cuyo secretario general es Zurab Pololikashvili, tuvo como tema el desarrollo rural, la conservación del medio ambiente y la tecnología.
El ejemplo de los Pueblos Mágicos fue mencionado en varias ocasiones, pero las autoridades de México no asistieron.
Una historia similar ocurrió en septiembre durante la Reunión Bianual de la OMT en San Petersburgo, Rusia, donde incluso México obtuvo un par de premios que nadie recogió.
México ha sido un jugador de primera línea en la OMT, incluso su primer secretario general fue el mexicano Antonio Enriquez Savignac; además es una voz respetada en las discusiones sobre política turística internacional.
Seguirse retrayendo de la OMT es negativo en varios sentidos:
1. México pierde la oportunidad de participar e incluir su visión dentro de las grandes discusiones del turismo global.
2. También la posibilidad de influir con su voto y con su liderazgo, no sólo dentro de la OMT, sino en el conjunto de los organismos del circuito de Naciones Unidas.
3. Además baja su interlocución a nivel empresarial, no sólo con los organismos privados que participan en la OMT sino en el grupo de las grandes empresas que participan en el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) que encabeza la mexicana Gloria Guevara.
Si por una decisión de política interna, por falta de presupuesto o por otra razón, el gobierno mexicano seguirá tomando distancia de los organismos internacionales; podrían ser instituciones académicas de prestigio o instituciones representativas y sin fines de lucro, como la Asociación de Secretarios Estatales de Turismo, las que deberían recibir el aval para representar a México.
El beneficio será para el país, como es dañino para el mismo perder una posición que se ha construido durante tanto tiempo.
Divisadero
Gatwick. Hace falta imaginación para pensar que hace 34 años llegó a Los Cabos el primer vuelo internacional procedente de Los Ángeles; pues hoy hay 26 rutas desde esa nación y más de una decena desde Canadá que significan millones de visitantes al año.
Y en ese recuento ayer llegó el primer vuelo de Europa procedente de Londres-Gatwick; un aparato repleto de personas que aplaudieron y se emocionaron por haber estado en el primer vuelo comercial desde Europa a Los Cabos.
El capitán provocó una carcajada colectiva cuando dijo: “Abajo va a haber muchos fotógrafos, para que tengan cuidado quienes no vienen con sus parejas”.
También abajo estaba el gobernador Carlos Mendoza, quien después de haber vivido dos años en Londres les dio en perfecto inglés la bienvenida a más de 300 viajeros.
