Dos incipientes películas de terror sobre el turismo mexicano

 
Carlos Velázquez
hrs.

Desde que la consultoría Gemes, de Héctor Flores Santana, comenzó a medir su Índice de Tarifa Efectiva (ITE), que en inglés se conoce como RevPAR o ganancias sobre cuarto disponible, nunca se había hundido al nivel del pasado mes de marzo.



Lo peor es que se trata del primer registro de la debacle, algo así como la “punta del iceberg” de esa siniestra montaña de hielo bajo el agua en que se ha convertido el Covid-19.

¿Malos momento? El tercer trimestre de 2017 cuando de una base de 100 bajó a -96.2; otro el tercer trimestre del 2019 cuando fue de -96; pero en este primer trimestre de 2020, sólo porque “mordió” la segunda quincena de marzo, cayó hasta 82.8.

Esto significa que 15 días bastaron para que el ITE se clavara -16.3%, no obstante que las tarifas se mantuvieron estables aunque haya cerrado gran parte de la oferta de cuartos disponibles.

El documento señala que fue “la caída en la ocupación la que influyó en la disminución del índice, ya que la tarifa promedio se mantuvo bastante estable durante el periodo, con un crecimiento de 0.2% respecto al mismo trimestre del año anterior, aun cuando este crecimiento es inferior a la inflación general de la economía” con un aumento de 3.4% en el Índice de Precios al Consumidor.

De hecho hasta aquí el porcentaje de ocupación disminuyó 9.6 puntos porcentuales, una baja que “no refleja aún la magnitud del problema que enfrenta la industria hotelera”.

Lo peor, mucho peor, ya lo están sufriendo los hoteles ahora mismo; aunque la película sólo comenzará a conocerse para la segunda quincena de julio y desde ahora promete ser una “película de terror” propia de Alfred Hitchcock.

Divisadero

Aeronáutica en picada. Y si Flores Santana, quien fue Secretario de Turismo en el último año del gobierno de Ernesto Zedillo, presentó esa película de horror; Francisco Madrid, académico de la Anáhuac y dos veces ex subsecretario, también hizo su aportación al género.

En uno de sus cuadritos, comparó la oferta aérea de Estados Unidos a México entre la segunda quincena de junio de 2020 contra el mismo periodo de 2019.

A estas “alturas del partido” pero del año pasado, había 49 aeropuertos de origen de la Unión Americana a México y ahora resulta que sólo hay 30.

Los aeropuertos de destino en nuestro país eran 30 y para junio de 2020 sólo había 23; además eran 195 las rutas y ahora sólo quedan 82 con las frecuencias muy afectadas.

Un hecho que se refleja en el número de vuelos disponibles, pues había un total de cinco mil 616 y ahora sólo quedan mil 103.

Para terminar había 811 mil 714 asientos disponibles, contra 157 mil 451 en la actualidad, lo que implica una contracción de -80.6%. La verdad que ni se antojan las palomitas…

Declaración. Miguel Torruco, el secretario de Turismo, dijo el lunes que “tenemos que quedarnos en casa y esperar la indicaciones de la autoridad (…) para evitar un rebrote que retrasaría mucho a la actividad turística”. Totalmente de acuerdo.



hrs.

Periodista apasionado de los viajes y de entender y comunicar cómo funciona la industria del turismo.

Notas relacionadas
Ir a la barra de herramientas