Después de los hechos violentos del primero de mayo en Jalisco, nuevamente el arribo de cruceros a Puerto Vallarta está en una encrucijada y un añejo, pero importante tema se encuentra en la palestra: ofrecer información confiable, creíble, consistente, de calidad, en el momento adecuado; y como no se hace, allí se gestan los problemas.
Coordinación y disciplina, algo que no se hace muy bien en México, son las palabras clave, pues las navieras no cancelan los arribos de sus barcos porque estén sobrerreaccionando a un problema, sino debido a la falta de información concreta.
En la administración pasada **Eduardo González Cid**, ahora asesor para este tema en la Comisión de Turismo del Senado, apoyó la redacción de un Protocolo de Acción en Comunicación Turística Total (PACTT).
De hecho, **Óscar Pérez Flores**, director general de Turismo de Puerto Vallarta, está logrando que Carnival, la naviera más grande del mundo, no cancele la llegada de barcos de toda esta temporada, aunque Royal Caribean sí lo hizo y Disney está por tomar una decisión. La razón por la que Carnival mantuvo algunas llegadas es porque consideró que había información precisa y con el suficiente respaldo oficial, como para darle certidumbre a la empresa de que podía seguir operando.
Esto, que fue producto de una respuesta bien estructurada, debería funcionar en automático aplicando el mencionado protocolo, como quiera que se llamara en el futuro.
El PACTT no es un asunto de ciencias ocultas, sino que parte de tres fases que son identificación y alerta sobre un suceso; activación del canal de información y seguimiento y resolución del suceso.
Estas etapas tampoco son producto de la imaginación, sino de la manera en que los destinos de cruceros más desarrollados del mundo, como de hecho deberían ser los mexicanos, reaccionan ante un suceso.
En el pasado hubo eventos lamentables como aquel turista que recibió un balazo en una pierna en Mazatlán, en medio de un enfrentamiento de narcos, o de un asalto a turistas en Vallarta. El problema no fue tanto los eventos en sí, sino la falta de información suficiente, oportuna, autorizada y creíble.
Para eso la Secretaría de Turismo y el Consejo de Promoción Turística deben tener una participación muy relevante, eligiendo un vocero y determinando una ruta crítica para dar seguimiento al asunto. El trabajo de las autoridades de Vallarta ponen esta situación de nuevo como aspecto de análisis y si se establece una manera ordenada de actuar ante sucesos complicados, incluyendo catástrofes naturales, el camino será el correcto para que problemas coyunturales no crezcan y sean vistos en su justa dimensión.
**DIVISADERO**
Ingresos adicionales. Un dato sorpresivo en el comportamiento de la industria aérea es lo que ganan las aerolíneas por los cobros a bordo como bebidas, alimentos y maletas extra; además de cambios de reservas.
Los llamados ancillary generaron a la industria aérea de EU más de tres mil millones de dólares de ingresos el año pasado. Una cifra que conoce bien Volaris y que ojalá no escuchen otras aerolíneas mexicanas.
