El miércoles mismo, poco después de que Felipe Calderón instruyera en Cozumel a Gloria Guevara, la secretaria de Turismo, para facilitar los permisos y concretar los dos home ports en los que Carnival ofreció invertir 150 millones de dólares, los hoteleros tomaron contacto con las autoridades de Quintana Roo.
El equipo de Roberto Borge tuvo que informar que la propuesta venÃa de la naviera y de la Presidencia y que no habÃan preguntado el punto de vista del gobierno estatal.
Hace unos años la familia de Rodrigo de la Peña, hoy presidente de los hoteleros de Cancún; pero también Fernando GarcÃa Zalvidea, José y Roberto Chapur y otros relevantes empresarios turÃsticos de la región se opusieron a una propuesta similar.
El autor de la misma fue Miguel Quintana Palli, otro de los exitosos hombres de negocios de esa entidad, quien preside el grupo que hoy se llama Experiencias Xcaret.
En aquel momento ambas partes patrocinaron estudios, pagaron cabilderos y el argumento que prevaleció fue que un home port le fincarÃa una competencia desleal a los hoteles que incluso no alcanzan a llenarse debido a la insuficiente conectividad aérea.
Juan Carlos González, secretario de Turtismo de Quintana Roo, conoce bien el tema, fue presidente municipal de Cozumel, que durante años ha sido el principal destino de cruceros del mundo.
Para comenzar, serÃa el nuevo aeropuerto de Tulum, el que le darÃa un sentido de conectividad diferente a la zona pues presumiblemente generarÃa nuevos vuelos y más asientos disponibles.
Pero ese aeropuerto no prosperó en esta administración por lo que presumiblemente los poderosos empresarios de la Hotelería local, para no hablar de los inversionistas españoles, no tienen elementos distintos para estar de acuerdo.
Después habrÃa que conocer el punto de vista de Quintana, a quien le dijeron que no en su propiedad, y ahora se estarÃa empujando a Calica, en la misma zona en que se encuentra Xcaret.
Para no hablar sobre la opción de hacer el home port en Cozumel, donde hay toda la infraestructura necesaria para ello y está presente Asur, de Fernando Chico Pardo, con los recursos necesarios para ampliar la pista aérea.
Un home port, ciertamente, acabarÃa con el âabsurdoâ, como lo calificó Calderón, de que los mexicanos que hoy desean viajar en crucero tengan que ir al extranjero para abordar el barco.
ReforzarÃa la competitividad de este producto, pues ciertamente las tendencias reflejan una baja en la llegada de estos hoteles flotantes a México contra el crecimiento que registran el Mediterráneo y el PacÃfico Sur.
Asà es que Calderón le pudo haber lanzado una âpapa calienteâ a Guevara, quien ya ha demostrado varias veces el ahÃnco con que cumple las instrucciones de su jefe.
