Sucedió lo que todos ya sabíamos y nos permitíamos guardar en el más absoluto de los silencios. México ya no está en las 10 primeras potencias turísticas del mundo.
Y digo que nos lo callamos porque ya hace 6 meses se había anunciado el descalabro, pero como por arte de magia, la anterior secretaria de turismo tuvo a bien contradecir las cifras de la Organización Mundial de Turismo (las cuales son obtenidas a través de la información que genera el Banco de México) y así, Gloria Guevara, dijo que no se habían incluido los “turistas” que entran a nuestro país por la frontera sur.
De un plumazo ambas instituciones hicieron la corrección y le acumularon a la maestra Guevara los “turistas de la Bestia” (el ferrocarril que cruza de sur a norte del país con inmigrantes de Centro y Sudamérica hacia los Estados Unidos). Y así nos “salvamos” por un pelito, lamentablemente solo por 6 meses ya que ahora se acaba de anunciar que Austria ya alcanzó los 24.1 millones de turistas anuales y por tanto se pone por encima de México (23.1 millones) cuyo crecimiento turístico sigue dando mucho que desear. Así que cada día se va más lejano eso de que seríamos el lugar número 5 del mundo para el año 2018.
Regresemos a nuestra realidad pues el tema no termina aquí, puede ponerse peor, ya que Rusia (lugar 12 en el ranking de 2011) y Hong Kong (en el 13) aun no presentan sus cifras al organismo mundial. Se espera un crecimiento de ambas por encima del 4%, cuando México descendió entre 2011 y 2012 en 1.4%
Pero lo más impresionante es la baja de recursos o ingresos de divisas, que es el que verdaderamente importa.
Recordamos que por allá de los años 70 el turismo fue el número uno en entrada de divisas de todas las actividades económicas del país. Ya para los 80, pasamos a segundo término, exactamente detrás del petróleo. Sin embargo para el periodo 90-00 nos fuimos al 3 puesto rebasados ampliamente por la entrada de divisas de envían nuestros connacionales de los Estados Unidos. Hace unos días quedó de manifiesto que ya nos fuimos a una cuarta posición al quedar registrado que el sector automotriz se ha convertido en el primer lugar de ingreso de divisas al país con más de 32 mil millones de dólares.
Y si tomamos como referencia los ingresos mundiales por turistas, México ha caído a la posición número 24 con un crecimiento muy por debajo de todos los otros países receptores de turismo. A principio de este nuevo siglo ocupábamos el lugar 14. Y eso que de acuerdo a la información de Banxico, el país tuvo un incremento en ingresos por turistas internacionales, pues se llegó a una cifra de 10 mil 712 millones de dólares, lo que significó un avance de 7.05 por ciento.
Durante el año pasado los turistas gastaron en promedio durante su estadía 463.46 dólares, un crecimiento de 8.4 por ciento respecto a lo reportado en 2011.
Y la pregunta que todo el sector se sigue haciendo es por qué estamos cayendo, sin que nada nos detenga: lo tenemos todo, cultura, arqueología, sol, playas magnificas, excelentes hoteles, buen servicio, calidez y camaradería.
¿Es en realidad la inseguridad la que nos está afectando?
Pues diríamos que sí y no, ya que la baja no viene exclusivamente de estos últimos 6 años. La baja se está dando desde hace más de 15. Perdemos competitividad por que no hemos aprendido a medir nuestro gasto promocional.
Hoy contamos con más de 125 millones de dólares para la promoción y publicidad turística, pero desconocemos el verdadero impacto y resultado de la misma. No medimos cuantos turistas adicionales vinieron de alguna región después de haber realizado una campaña en esa zona. No por ello minimizamos el aspecto de inseguridad que damos en el mundo. Sin embargo, países como España vivieron por más de 40 años con un terrorismo recalcitrante, y su turismo no por eso bajo., sino que siguió y sigue creciendo.
Ahora es el momento de un nuevo accionar, de evaluar y analizar a fondo lo que debemos hacer para retomar el camino del crecimiento.
Hace unos días el presidente Peña Nieto anuncio una inversión al turismo de más de cien mil millones de pesos (algo así como 7 mil millones de dólares) Pero cuando analizamos en que se invertiría esa enorme cantidad de dineros vimos que se trataba de infraestructura, es decir carreteras, renovación de aeropuertos, etc. Y nos quedó la gran duda ¿todo eso traerá más turismo y más divisas?