Si algo hay que reconocerle a Jorge Hernández, presidente de la Confederación Nacional Turística (CNT), es que más allá de las “diferencias adquiridas” con la Sectur federal, ha trabajado para mantener una agenda relevante para el turismo.
Después de que su consejo directivo se reunió con Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de las izquierdas, quien además, impulsa como su eventual titular de la Secretaría de Turismo a Miguel Torruco, anterior presidente de la CNT, esta organización no ha logrado dialogar con los candidatos restantes.
Incluso tuvo una sesión con los colaboradores del candidato priista Enrique Peña Nieto, que hasta ahora no se ha traducido en la respectiva visita de quien encabeza las encuestas para ser el próximo titular del Poder Ejecutivo.
Pero mientras dichas agendas se siguen cocinando, Hernández le ha dado énfasis al turismo y la competencia por el gobierno de la Ciudad de México, que es la principal puerta de entrada a los turistas internacionales por la vía aérea.
La primera vocación de la capital es el turismo de negocios, pero también es motivo y punto final o de partida para los viajes con motivo de placer.
La CNT sí ha tenido acceso a los candidatos a la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México y allí ha propuesto temas claves, como la necesidad de ampliar el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México.
De lo contrario, muy pronto se convertirá en el mayor cuello de botella para la llegada de viajeros al país.
Otro asunto tiene que ver incluso con la eliminación del programa “Hoy no circula” que, controlada en alguna medida la contaminación ambiental, se ha convertido en una barrera para la llegada por tierra de turistas nacionales.
Adicionalmente, hay propuestas complejas de implementar como la de los hoteleros, que proponen no permitir las marchas que paralizan la ciudad y frenan el arribo de turistas nacionales. Una propuesta incompatible con la democracia.
Hoy los ojos mediáticos están puestos en las campañas presidenciales, pero ciertamente el impacto de lo que ocurrirá en la capital es un área de oportunidad para tener también una agenda puntual que beneficie al turismo.
Divisadero
CPTM. Aunque no es un secreto que personajes de primera línea del Consejo de Promoción Turística de México han cabildeado con los empresarios para permanecer en sus posiciones al cambio de gobierno, la prueba de fuego no depende de ellos.
El problema real son los compromisos derivados de una campaña competida, que seguramente obligarán al nuevo titular del Ejecutivo a compartir sus espacios con quienes lo apoyaron.
El hecho también es que existen mandos medios que le siguen dando un sustento al CPTM y de quienes depende su solidez institucional más allá de los grandes compromisos políticos.
