Impulsa conectividad aérea turismo en Quintana Roo

 
Alonso Gordoa
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Quienes vieron al magnate **Richard Branson**, presidente de Virgin Atlantic, trepado en el ala de uno de sus aviones con una modelo en sus brazos al término del vuelo inaugural de Londres a Cancún, difícilmente habrán percibido los alcances de dicha imagen para este destino turístico.



Y es que más allá de que hay días en los que llegan varios vuelos desde Gran Bretaña, y de que Virgin ya haya anunciado una nueva frecuencia en 2013 para la temporada de invierno, hoy se está creando un círculo virtuoso en donde el tema de la inseguridad está siendo superado.

Las razones por las que Quintana Roo es un estado seguro van desde las que hablan de la eficacia de un gobierno estatal, aunque su policía no ha sido certificada según los criterios de la Secretaría de Seguridad Pública, hasta los que citan las características geográficas e, incluso, una especie de “mano invisible” que cuida a los empresarios.

Según esta última versión, los propios actores del crimen organizado saben que atentar contra los principales actores económicos derivaría en una salida masiva de personas y de capitales, por lo que prefieren seguir operando con las reglas minoristas del narcotráfico en un estado muy rico y fiestero.

El hecho es que los estadunidenses, canadienses, europeos y asiáticos tienen cada vez menos miedo, entre otras razones, porque personajes como Branson se pasean allí sin problemas.

Pero no todo es perfecto y en el último año el tema de la aviación también ha puesto de manifiesto las debilidades y fortalezas de otras aerolíneas y sus alianzas.

Precisamente Air France, que dirige en México **Jerome Salemi**, tuvo que suspender temporalmente su ruta entre París y Cancún por diferencias de Delta, su asociado estadunidense.

Ambos son miembros de la alianza Sky Team y, de acuerdo con sus reglas, Delta logró frenar a su socia en este recorrido, por la razón de que estaba perdiendo pasajeros.

Efectivamente antes del vuelo directo, los franceses que deseaban ir a Cancún lo hacían a través de Estados Unidos vía Delta.

Contrastantemente, American Airlines e Iberia, también socios y parte de la alianza One World, tienen un acuerdo en donde ambas aerolíneas se reparten los beneficios derivados de la apertura de nuevas rutas, así es que ellos no han frenado la llegada de turistas a Cancún.

Afortunadamente, el asunto se está solucionando y el incremento de la conectividad aérea también apoya el repunte que hoy viven los destinos turísticos de Quintana Roo.

Así es que los destinos de playa más relevantes de México no sólo ya le dieron vuelta a la página de la nueva influenza y la crisis económica en Estados Unidos, sino que tienen un panorama de franco crecimiento.



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