Como sucede en cada cambio de administración, el martes mismo inició la “gabinetitis”; un deporte nacional que consiste en inventar listas supuestamente susurradaspor una “garganta profunda”, con los nombres de quienes ocuparán la titularidad de las secretarías de Estado en este caso de Claudia Sheinbaum.
En una de ellas (seguramente hay más) aparece Altagracia Gómez Sierra como la próxima secretaria de Turismo, lo que es solamente un pronóstico de alguna mente exaltada.
Pero ciertamente hay algunos antecedentes que vale la pena saber sobre esta empresaria, que coordinó la Mesa de Trabajo sobre Desarrollo Regional y Relocalización de Empresas durante la campaña de la virtual presidenta electa.
Primero que fue ella a quien un grupo de dirigentes del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), le presentó en privado los 10 compromisos que pide este organismo para desarrollar al sector.
Antes el CNET estuvo en una reunión con Gerardo Esquivel, ex subsecretario de Hacienda, otro de los colaboradores cercanos de Scheinbaum en materia económica.
Gómez Sierra sorprendió a los participantes en aquella reunión por su inteligencia y también hubo coincidencia en algunos aspectos del documento como la importancia de la promoción, la transformación digital, la sostenibilidad y el apoyo a las micro y pequeñas empresas.
De hecho Gómez Sierra, quien acometió la tarea de trazar un mapa sobre los que ella llama los Corredores de Desarrollo Regional, incluyó también los que considera que tienen relevancia turística.
La lista abarca el Valle de Guadalupe en Baja California; Los Cabos y parte del municipio de La Paz en Baja California Sur; Mazatlán en Sinaloa; las Islas Marías y la Riviera Nayarit en Nayarit; Puerto Vallarta en Jalisco; la Costa Alegre en Jalisco y Colima; la ciudad de Michoacán y alrededores; Zihuatanejo y Acapulco.
También Oaxaca y Huatulco; los Altos de Chiapas; gran parte de Quintana Roo; Mérida y alrededores; el sur y el puerto de Veracruz; parte de Puebla, del Estado de México; Monterrey y el centro del estado deChihuahua.
Hay otros insignificantes hasta completar 26 centros turísticos.
No se trata solamente de que cuenten con atractivos, sino de que haya condiciones que abarcan infraestructura de comunicaciones ycentros educativos.
Como siempre además de las buenas ideas, un reto igualmente importante es la ejecución de las buenas ideas y para ello no ha llegadoel primero de octubre.
Gómez Sierra es una sorpresa, hasta donde se percibe su ámbito de influencia económica rebasará al turismo; aunque en muchos países ese sector forma parte de la Secretaría o del Ministerio de Economía.
Hija de Raymundo Gómez Flores, empresario quien entre sus múltiples negocios incursionó en el turismo con Camino Real Acapulco, ella preside el corporativo familiar que lo mismo produce harina de maíz, que camiones o desarrolla proyectos inmobiliarios.
Su seguridad personal, agilidad mental y profundidad son notables, pero seguramente nisiquiera Sheinbaum ha terminado de decidir en donde la invitará a participar, comenzandoporque tampoco ha recibido su constancia como presidenta electa.
Divisadero
El lado bueno. Para quienes dicen que fueron muy pocas las menciones que obtuvo Los Cabos en la Guía Michelín; Rodrigo Esponda, titular del Fideicomiso de Turismo de Los Cabos (Fiturca),ya está diseñando una serie de acciones para “presumir” a los restaurantes y chefs que sí llegaron.
Como han probado claramente las gallinas,“no sólo hay que poner el huevo sino hay que saberlo cacarear”.
