**Sergio Allard** fue electo presidente de la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), en lo que parecería ser la última gran oportunidad de esta organización para fortalecerse y ampliar su influencia.
Un hecho que ocurre en un momento en el que la aviación mexicana atraviesa por una situación crucial, debido a la firma del Bilateral Aéreo entre México y Estados Unidos y la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).
**Allard**, quien es director ejecutivo de Talento y Relaciones Institucionales de Aeroméxico, ganó por consenso de los nueve votos que integran la mesa directiva de la Canaero, recientemente enjuiciada por Interjet que decidió salirse a finales del año pasado.
Precisamente lo que llevó a **Miguel Alemán Magnani**, presidente ejecutivo de Interjet, a calificar a la Canaero como una “vacilada” fue que **Fernando Flores**, presidente saliente y aliado de Aeroméxico, hubiera impedido la llegada de VivaAerobus a la presidencia.
En este contexto, la elección de **Allard** se explica en primer lugar porque se trata de un ejecutivo respetado, con una capacidad notable para generar empatía y, en segundo porque presentó un programa de trabajo que ofrece cambios de fondo a la Canaero.
Sus objetivos son:
1.- Impulsar que el diseño de los procesos operativos del NAICM responda a las expectativas de crecimiento del sector aeronáutico mexicano.
2.- Establecer una agenda para que los grupos aeroportuarios del país trabajen en función de las necesidades de las aerolíneas.
3.- Impulsar una reforma a la Ley de Aeronáutica Civil, para conciliar los derechos de los pasajeros con las prácticas competitivas en materia de aviación.
4.- Homologar los procesos de operación en México con los de Estados Unidos, tras la firma del Bilateral.
5.- Apoyar la simplificación de los procesos gubernamentales, en especial los que involucran al Instituto Nacional de Migración y a la Dirección General de Aduanas.
La otra novedad es la manera en que, tras la celebración de la asamblea general, quedó integrada la mesa directiva de la Canaero.
En la primera presidencia quedó Volaris; en la segunda VivaAerobus; en la tercera Lan; en la Secretaría United y en la Tesorería American Airlines.
Así es que las aerolíneas extranjeras y dos de los competidores más importantes de Aeroméxico tienen representatividad directa.
Adicionalmente, los nueve votos de la mesa directiva quedaron integrados por Aeroméxico, Air Canada, Air France, Delta, Copa, Lan, Sintra por servicios en tierra, Estafeta por servicios de carga y First por taxis aéreos.
Tanto a nivel de Aeroméxico como de las autoridades de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes, hubo esfuerzos que resultaron infructuosos para lograr el regreso de Interjet.
Sin embargo, ahora no sólo está en una de las vicepresidencias VivaAerobus, sino en la tesorería American, con la que Interjet tiene relaciones de negocios.
Mientras que en la mesa directiva están la propia American y Lan, otro de los aliados comerciales de Interjet.
Si **Allard** consigue que la Canaero haga un trabajo efectivo y democrático a favor de este sector, es probable que Interjet encuentre las razones para regresar.
