**Héctor Gómez Barraza**, director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), tomó como estrategia comunicar claramente cuál es la situación de este organismo, para que después no le vayan a cargar los “muertitos” que se encontró en el clóset.
Desde finales de la administración pasada ya era público el enorme adeudo que venía arrastrando y que asciende a casi cuatro mil quinientos millones de pesos.
En su diagnóstico, el funcionario refirió que ello se debe a deudas excesivas con los bancos de desarrollo, contratación de créditos caros y reglas obsoletas de comercialización.
La salida requerirá de una inyección importante de recursos fiscales o la decisión de extinguirlo al menor costo posible, que en todo caso será muy alto para el turismo.
Darle otra vez el mandato, como hizo **Vicente Fox** a **John McCarthy**, director de Fonatur en su sexenio, de que se mantenga a través de la comercialización de sus activos tendría un costo de oportunidad enorme para el desarrollo del turismo.
Incluso McCarthy, quien es un gran vendedor, tuvo problemas para cumplir esa orden y ello derivó en una dinámica que lo involucró en actividades que no eran de sus especialidad, como la construcción de un hospital de genómica que terminó por costarle una fortuna.
Hoy darse a la tarea de rematar sus activos para mantener su operación, iría en contra de toda lógica de desarrollo turístico.
Si la salida tiene que ser por el lado de la liquidación, otra institución o instituciones deberán hacerse cargo con eficiencia de consolidar a los Centros Integralmente Planeados y de crear las condiciones para que aumente la inversión privada y pública en el turismo.
**Divisadero**
Recorte en EU. Un verdadero calvario es el que le espera a los viajeros mexicanos que irán a Estados Unidos en Semana Santa y en el verano, pues para acatar la orden del presidente Barack Obama de recortar el presupuesto de ese país habrá menos empleados de Migración.
Aeropuertos como Los Ángeles, Chicago y Nueva York serán los más afectados, lo que incluso debería influir en un cambio de destino de viaje para quienes todavía tienen la posibilidad de hacerlo.
AFEET. En lo que ha sido una historia “en lo oscurito”, **Alicia Teherán** retomó la presidencia de la Asociación Femenina de Empresarias y Ejecutiva del Turismo, aunque **Ana Moisés** había ganado las elecciones.
Esta última quiso cambiar a la mesa directiva, lo que provocó una revuelta interna, así es que la bloquearon con la amenaza de sacarle sus “trapitos al sol”.
La historia no sólo revela qué tan enjuiciables pueden ser los “Clubes de Tobi” como los de “Lulú”, sino que debería ser una llamada de atención para que la AFEET se modernice y actúe con más transparencia.