Este viernes el Centro de Investigación Turística de la Anáhuac (Cicotur), utilizando las cifras del Instituto Nacional de Migración (INM), dio a conocer que los viajeros internacionales por vía aérea a México sumaron 14.65 millones de enero a septiembre, 28.4% más que en el mismo periodo de 2019.
La crisis de la pandemia del Covid-19 fue superada a pesar del gobierno mexicano, que en el mejor de los casos ha permanecido como un espectador, pero en otros incluso está actuando en contra del turismo.
No es una exageración. Para empezar Miguel Torruco convirtió en un “florero” a su Secretaría de Turismo, que no está incidiendo ni en la promoción, ni promoviendo nuevas inversiones, ni en la conectividad aérea.
Pero lo que está pasando en la Secretaría de Relaciones Exteriores, donde su titular es una nueva estrella del Tik Tok que se llama Marcelo Ebrard, de plano está poniendo en valor la conocida frase: “Mucho ayuda el que no estorba”.
En lo que ya parecía un capítulo superado, el canciller parece decidido a hacerle la tarea de cuidarle las fronteras al gobierno de Estados Unidos, a través de su política de visado.
La decisión equivocada más visible es haberles regresado la visa a los brasileños, una medida que, según consideraciones de Jesús Almaguer, presidente de la Asociación de Hoteles de Cancún, ya le costó 40 millones de dólares al Caribe Mexicano por la pérdida de visitantes de ese país.
Además, la cancillería eliminó de nuevo las visas electrónicas, lo que es algo así como regresar a la edad de Pedro Picapiedra con sellito en la mano.
En un país del tamaño de Brasil, moverse desde provincias fuera de Río de Janeiro y de San Pablo, puede requerir transporte aéreo y hospedaje; además empoderando inexplicablemente a los cónsules.
Así es que algunos tienen la puntada de darle visa a unos miembros sí y otros no de la misma familia y los brasileños que deseaban visitar el Caribe Mexicano están optando por otros destinos que no les compliquen la vida.
Brasil en el periodo de enero a septiembre, ya está -22.3% abajo respecto a 2019 y tiene un aumento marginal de 2.8% contra el año pasado, en donde están pesando las cifras del arranque de 2022 cuando todavía no había visa.
La eliminación de la visa electrónica no es privativa de Brasil, otro caso es el de Turquía donde el trámite de nuevo tiene que ser físico y presencial; la consecuencia es que los cónsules acotan a 25 ó 30 revisiones por día y esto ya se convirtió en un cuello de botella.
La consecuencia es que mientras Ercan Yilmaz, el propietario de Megatravel, sigue llevando a un número de creciente de mexicanos a ese país; son pocos los turcos que pueden venir a México.
El otro caso grave es el del Instituto Nacional de Migración, cuyo titular es Francisco Garduño, pues proliferan las quejas de la embajada de Colombia en México por el mal trato que reciben sus conciudadanos en los aeropuertos.
Además, ya quedó claro que no habrá presupuesto para más oficiales en lo que resta del sexenio, así que habrá que esperar a que lleguen en unos años las soluciones digitales como el reconocimiento facial y los pasaportes electrónicos.
El turismo mexicano está creciendo, pero no gracias sino a pesar del gobierno.