SEÚL.— Hace apenas unos años, la razón principal por la que el Consejo de Promoción Turística de México (CPTM) no invertía más en promover Asia era la falta de conectividad, algo que está cambiando rápidamente.
Este lunes aterrizó en esta ciudad el vuelo inaugural de Aeroméxico que cubrirá la ruta entre la Ciudad de México y Seúl, con una escala a la ida en Monterrey.
Se trata de uno de los Boeing 787-8 que forman parte de ese pedido por 11 mil millones de dólares que hizo la compañía que dirige Andrés Conesa y de los cuales ya están volando 13.
Así es que ahora ya hay vuelos directos entre México y Asia a Japón, uno de Aeroméxico y otro de ANA; a Shanghái, de Aeroméxico; a Guangzhou de Southern China y éste de Seúl.
Un cambio histórico que, de acuerdo con Guillermo Eguiarte, director para Asia del Consejo de Promoción Turística de México (CPTM), ya no sólo hace viable sino relevante invertir en la promoción turística entre México y la región de mayor crecimiento económico en el mundo.
Por lo pronto el primer vuelo fue al 94% de su capacidad, prácticamente lleno y de acuerdo con Anko van der Werff, director comercial de la compañía, para el primer mes los pronósticos de ocupación serán del orden de 85%.
La idea es que si la demanda se sostiene, el vuelo que hoy opera con cuatro frecuencias semanales aumentará a siete como ya sucedió con el caso del vuelo que se realiza a Narita.
Pero además este vuelo puede haber nacido con el pie derecho por muchas razones, la primera porque permitirá conectar a los países de Centro y Sudamérica directamente con Seúl.
Se trata del primer vuelo directo de América Latina a Seúl y como sale por la noche, permitirá que durante el día lleguen viajeros desde diversas latitudes.
La segunda es porque Seúl es un hub que permite llegar otros muchos países interesantes de Asia como Tailandia, Vietnam, Camboya o la India.
Así es que los viajeros mexicanos tienen varias opciones para llegar a ese fascinante continente, no sólo por razones de negocios sino también de placer.
Finalmente no será muy fácil que Korean Air ponga competencia, pues técnicamente es imposible volar directamente desde la Ciudad de México a Seúl debido a la altura sobre el nivel del mar de la primera.
Así es que la compañía coreana tendría que hacer una escala, pero no podría subir ni bajar pasajeros debido a que ello implicaría un tema de libertades aéreas que no permite la legislación actual.
En cambio lo que está buscando Aeroméxico es establecer alianza con Korean Air para operar un código compartido y poder volar desde Seúl a otros destinos de la región.
Por el otro lado, la aerolínea asiática también podría beneficiarse al obtener una forma de conseguir ingresos con los viajeros de países de Centro y Sudamérica.
Las historias de negocios se escriben a partir de muchos factores, algunos imprevisibles; pero todo indica que el negocio turístico entre México y Asia toca la puerta al mejor momento de su historia.