Hacia el final de la administración pasada el entonces presidente Felipe Calderón le preguntó a Jorge Dávila, dirigente de la Confederación Nacional de Cámaras de Comercio, Servicios y Turismo (Concanaco-Servytur), cuánto les estaba costando la campaña Hablemos y actuemos bien por México.
“Casi nada”, le respondió el empresario de Coahuila.
“Hablemos con seriedad”, reviró el panista, “yo sé lo que cuesta hacer una campaña de publicidad”.
“En total —precisó Dávila— hemos gastado menos de 100 mil pesos”.
Y si dicho monto parece provenir del equipo de campaña de un político que le quiere esconder sus datos al Instituto Federal Electoral (IFE), éste no tiene motivo para hacerlo.
En cambio revela la penetración de ese organismo, que no sólo ostenta presencia nacional, sino que además forma parte de los órganos de gobiernos de instituciones como el Seguro Social y el Nacional de Fomento a la Vivienda.
El líder de Concanaco es un hombre de negocios pragmático que escoge sus batallas y en ésta ha encontrado una buena respuesta en el equipo del presidente Enrique Peña Nieto.
Los objetivos de este trabajo a favor de la imagen de México son incrementar las ventas de sus agremiados y regresarles algo del amor propio que han perdido en los últimos años, por el menoscabo internacional que ha sufrido el país.
Una historia en la que incluso algunos empresarios estadunidenses han participado, como tuvo pruebas Dávila en Texas en donde una cadena de outlets se sumó al golpeteo en contra de sus vecinos del sur para retener a los compradores estadunidenses.
Concanaco ha gastado poco, porque contrató un despacho recién constituido para hacerle creatividad y después la distribuyó en discos compactos entre sus agremiados, quienes la promueven en sus respectivas plazas.
Actividad que han realizado no sólo convocando a los periodistas a ruedas de prensa, sino a través de sus relaciones con los dueños y concesionarios de medios en el país.
Apenas el miércoles de la semana pasada, el presidente de Concanaco presentó su propuesta en la reunión de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), que se llevó a cabo en Huixquilucan por invitación de Eruviel Ávila, gobernador del Estado de México y sus miembros ofrecieron apoyarlo.
Allí estuvieron también Mario López Valdez, gobernador de Sinaloa y presidente de Conago, además de los mandatarios de Querétaro y San Luis Potosí.
La campaña está siendo cabildeada con el Consejo de Promoción Turística, que dirige Rodolfo López Negrete, por lo que no hay que descartar la posibilidad de que este organismo participe con recursos.
Una urgencia para el país no sólo es revertir el ambiente de violencia, sino combatir la visión de que México no tiene remedio y la campaña de Concanaco va en ese sentido.