Los Cabos. En la inauguración del décimooctavo VIP Summit, como se llama la feria de profesionales del turismo en este destino, Neto Coppel, el empresario sinaloense que consolidó aquí su fortuna, hizo una presentación muy formal.
Algo extraño, dado que siempre es bromista y disfruta provocando polémica.
Lo que pasó, me dijo, es que no se reían con nada; pues no es fácil conectar con un público donde hay alemanes, japoneses y variospaíses más.
Así es que les contó por qué Los Cabos es un destino de moda y reseñó brevemente sus éxitos empresariales.
Pero después, varios periodistas participaronen una improvisada rueda de prensa y en 20 minutos hizo una de las críticas más directas al desinterés que han mostrado las autoridades por el turismo.
Entre otras cosas, dijo que a Acapulco se lochingaron los chilangos y el desinterés por el destino, “aquí cuidamos los huevos de la canasta y allá traían la canasta de aquí para allá”.
¿Cómo querías que regresaran los artistas famosos si los taxistas se agarraban a balazos en los lobbys de los hoteles? Acapulco se murió hace mucho, pero no se lo han dicho, resumió.
También consideró una “mentira” que el CPTM haya sido un nido de ladrones, pues se tratabadel organismo más auditado y ahora falta la promoción.
Desde que empezó el desmadre en Culiacán, prosiguió, se me cayeron las ventas del Acuario, la última Asociación Público-Privada que se ha autorizado en México, porque 80% de los visitantes llegan por carretera y la gente tiene miedo de hacerlo.
“A donde vas conejo Blas, si esto es pleito de dos nomás”, así resumió la postura de las autoridades que han evitado enfrentar al narco en Sinaloa, argumentando que es un pleito entre facciones.
Entonces hizo un a sola petición: “Nos hace falta que el gobierno nos ayude a tener paz”.
Nadie nos hace caso a los empresarios, remató, nadie nos escucha o nos dan el avión, no somos importantes, les caemos gordos y somos los que creamos los empleos del país y generamos la riqueza.
José Antonio López Sosa, conductor de un programa de radio sobre turismo, armó un video que después reprodujeron Joaquín López Dóriga y Ricardo Salinas Pliego, empresario influyente en las redes sociales.
Así es que las declaraciones se hicieron virales y Coppel disfrutó de otro momento de fama.
Yo aprendo las cosas buenas incluso de mis competidores, contó a Veranda, y Julio Berdegué (qepd), el dueño de los hoteles El Cid de Mazatlán, decía que sólo había conseguido la atención de gobernadores como Antonio Toledo Corro, quien ya falleció también, cuando criticaba y hablaba fuerte.
En cambio, cuando fue discreto, sencillamente no le hicieron caso.
El video de Coppel suma cientos de miles de vistas y miles de comentarios a favor y en contra, pero hasta ahora ni un solo empresario turístico se ha sumado a respaldarlo.
El turismo necesita seguridad, algo que urge en Guerrero y Sinaloa; también requiere promoción de la marca país y es un hecho que a los empresarios turísticos el gobierno no les hace caso.
Pero al parecer no hay otros líderes empresariales dispuesto a hablar claro y a pedirle al gobierno federal algo básico como es la seguridad, pues por definición el Estado tiene el monopolio de la fuerza pública.
