La polémica en marcha por la posibilidad de abrir un homeport para cruceros en la Riviera Maya, tomará esta semana un rumbo interesante tras hacerse públicos los resultados del estudio que elaboró la Universidad del Caribe.
Arturo Escaip, rector de la misma, ya adelantó que existe evidencia de que en ninguna parte del mundo la construcción de un muelle de cruceros va acompañada de más cuartos de hotel ni tampoco de mayor ocupación.
Además confirma la tesis del “efecto sustitución”, según el cual la mayoría de los viajeros que optan por acudir a un destino en un crucero después ya no regresan pues lo dan por visto.
También refiere que son pocos los que antes o después del inicio del recorrido, toman unos días para quedarse a visitar el destino.
Por supuesto la visión de Carnival, la empresa que planteó construir un homeport en Calica, y de la Federación de Cruceros de Florida y el Caribe (FCCA, en inglés) es diferente y cuentan con sus propios estudios.
La polémica no cejará, pero ahora los siempre activos empresarios turísticos del Caribe mexicano tendrán nuevos elementos para argumentar en contra de este proyecto.
El único grupo local que está a favor del homeport es el de Miguel Quintana de Experiencias Xcaret, pero su propuesta es retomar la iniciativa previa que era construirlo en una propiedad cercana al parque de Xel-Há que conduce esta empresa.
Divisadero
Buenos números. En el primer cuatrimestre del año, los ingresos a través de la llegada de turistas internacionales aumentó 5.3 por ciento respecto a los que se reportaron en el mismo periodo del año anterior.
El turismo de internación mostró un crecimiento de 4.6%, el fronterizo cayó 3.6% y la llegada total de turistas internacionales subió 1.2%, esta sí es una cifra baja cuando la Organización Mundial de Turismo prevé para este año crecimientos superiores a cinco por ciento en el planeta.
Argentina se mantuvo en la tercera posición como mercado emisor de turistas de internación hacia México, pero existen dudas sobre el futuro inmediato de su economía.
Hoy Argentina tiene señalamientos de diversos países, entre ellos México, debido a la adopción de medidas proteccionistas lo que podría terminar operando en su contra.
En cambio Brasil es la gran sorpresa, pues la llegada de viajeros de ese país a México ya acumula una media de crecimiento anual de 30 por ciento de 2007 a la fecha.
Nada más en este primer trimestre, el arribo de brasileños volvió a crecer 69.5 por ciento contra el mismo periodo de 2011 y en números redondos significa que llegaron en estos cuatro meses unos 90 mil turistas.
El gasto de los viajeros brasileños fuera de su país el año pasado alcanzó la cifra de 20 mil millones de dólares, una de las más altas del mundo.
