Shangai. Mañana inicia la gira de Miguel Torruco, secretario de Turismo, por Pekín, la capital de China, como un nuevo esfuerzo del gobierno mexicano por acercarse al mercado emisor de turistas más importante del mundo.
Un diferenciador al que le está apostando este funcionario es a sus relaciones personales con algunos miembros del partido comunista chino, pues en aquel país muchas decisiones, incluso a dónde viajar, se toman desde las esferas gubernamentales.
Torruco va acompañado de un grupo de empresarios, touroperadores, secretarios estatales de turismo y al menos un periodista, el autor de este espacio, cada uno de los cuales ha corrido con sus gastos.
Algunos empresarios y funcionarios públicos que fueron invitados decidieron no asistir y las razones van desde problemas de agenda, falta de producto hacia el mercado chino, pero también hay quienes dudan de los resultados.
Habiendo “canicas” tan limitadas para “jugar”, no son pocos quienes consideran que lo más rentable es concentrarse en los mercados clave, como son Estados Unidos, Canadá, Reino Unido, España, Colombia, Argentina y Brasil.
Uno de los grandes retos para hacer negocio con China es la distancia y otro la falta de conectividad, que incluso tenderá a ser mayor, pues Aeroméxico ya anunció que retirará su vuelo a Shangai.
También la falta de guías de turistas en México que hablen mandarín, la carencia de productos ex profeso para el mercado chino y la poca preparación de la mayoría de los hoteles para recibir a estos viajeros.
Sin embargo, desde hace ya muchos años las autoridades turísticas de México han intentando conquistar al mercado chino; comenzando por Rodolfo Elizondo y su otrora súper asesor Gabriel Székely quien no concebía el futuro del turismo mexicano sin los mercados asiáticos.
Hay que recordar también que Claudia Ruiz Massieu hizo como titular de Turismo su primer viaje largo precisamente a China, donde se reunió con directivos de aerolíneas e inversionistas.
Esta vez la agenda está mucho más cargada a presentarles los atractivos de México a las autoridades chinas y a los profesionales de los viajes, a través de un seminario que se llamará “Así es México”.
También se prevé un intercambio de experiencias con los actores relevantes del turismo de México y China.
Otro evento será una reunión con la Cámara de Comercio de México en China.
Con las limitaciones presupuestales y el desinterés que ha mostrado la Presidencia por el turismo, es deseable que el secretario Torruco de verdad consiga un avance relevante en la llegada de chinos a México.
En la actualidad son 170 mil los que arriban a México cada año, la mayoría por motivos de negocios y muchos de ellos a través de Canadá y California.
El año pasado ni siquiera cerró entre los 15 emisores de turistas más importantes y su peso ponderado rondó el 0.15%.
Sin embargo, negar la realidad de su tamaño, la importancia crucial que hoy tiene China en el turismo mundial y el peso que podrían tener sus inversiones en México, explican por qué los gobiernos mexicanos de todos los colores han buscado una rebanada de ese estratégico “pastel”.
