Luego de permanecerá tres años cerrado al turismo internacional, el gobierno de China anunció que el 8 de enero levantará la medida de aislamiento.
Sin embargo, para quienes ingresen al país continuará solicitando una prueba negativa de Covid-19 que se haya realizado al menos 48 antes de entrar a China.
Desde 2020, el país asiático cerró sus fronteras al turismo internacional, y a quienes llegaron a entrar por alguna actividad esencial debía cumplir con una cuarentena obligatoria al llegar al país, la cual ya no será solicitada.
En noviembre de 2022 ya había anunciado que disminuirían sus estrictas políticas de viaje. Las restricciones serían fueron más relajadas, pero el número de contagios por Covid-19 volvió a incrementar en diciembre; por tanto, varios países ahora les solicitan a los chinos aplicarse una prueba negativa para ingresar como turistas.
Ante ello, el gobierno chino advirtió que podría tomar represalias basadas en el principio de reciprocidad.
“Algunos países han establecido restricciones de entrada dirigidas exclusivamente a los viajeros chinos. Esto no tiene base científica y algunas prácticas son inaceptables”, afirmó Mao Ning, vocero del Ministerio de Relaciones Exteriores de China.
Abiertamente países como Francia, Italia y España han publicado que intensificaron las restricciones al turismo internacional, en particular a los que proceden de China.
Estados Unidos, Taiwán, Japón, India y Filipinas están solicitando el test negativo a los viajeros procedentes de China. Lo anterior en cumplimiento con el anuncio de la Comisión Europea de mantenerse vigilante y aplicarles nuevas restricciones de viaje.