Al viajar hay partes del cerebro que se estimulan y resultan favorables para el turista, por lo que se generan beneficios físicos y mentales.
De acuerdo con la Sociedad Española de Neurología el turista al llegar a un nuevo sitio, en donde se encuentra nuevos paisajes, sonidos, aromas y personas, le provoca un estímulo en las neuronas y las fortalece.
Procurando el cuidado de su salud mental y física, los turistas incrementaron, durante y después de la pandemia, sus viajes a los destinos de naturaleza, comentó Judith Guerra, CEO de Consolid México.
Las actividades al aire libre, de aventura, de bienestar y holísticas han sido altamente solicitadas, además de que hubo una “revalorización de la vida”.
La Universidad de Washington realizó un ensayo, con una muestra de cinco mil personas, donde resultó que los viajeros frecuentes están más satisfechos con su vida, lo cual aumentó su nivel de felicidad en 7%.
Por su parte, Jorge Baruch, director de la Clínica del Viajero de la Universidad Autónoma de México (UNAM), dio su opinión desde la parte médica, dijo que además de los beneficios favorables para la salud mental al momento de viajar, el cuidado de la salud física era importante.
Ante ello, dijo que hay recomendaciones dependiendo la región del mundo que recorrerán, y si viajan acompañados de mujeres embarazadas, niños y adultos mayores.
Considerando la actual temporada de calor, sugirió los repelentes de moscos de larga duración y los protectores solares. La forma de usarlos juntos es que se aplique primero el protector solar y en segundo lugar el repelente para mantener su efecto y cuidar el tiempo de exposición al sol.
Otras recomendaciones fueron contemplar periodos de descanso y siestas no mayores de 20 minutos, combinar actividades físicas con hidratación continua y usar ropa que cubra la mayor parte de la piel.
También el uso de gafas polarizadas para el sol, sombreros de ala ancha y que la ropa sea de colores claros.
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