Los Cabos. Miguel Torruco, titular de la Secretaría de Turismo (Sectur), no escucha en público y tampoco en privado; su discurso no cambia, aunque la realidad y la máxima autoridad estadística del país lo desmientan.
Quienes osan externar desacuerdo, son increpados o calificados de corruptos.
Y los líderes de la industria turística mejor no lo confrontan, les parece inútil, ocioso; Sectur carece de programas, presupuesto y herramientas; así es que lo más práctico es meterse a la misma piscina, donde todos “nadan de muertito”.
Con “guantes de terciopelo”, Jaime Salazar, presidente del Consejo Mexicano de la Industria de Reuniones (Comir), se refirió a la contracción del PIB turístico al arranque del año, que detalló hace dos semanas el INEGI.
En la inauguración del XXVI Congreso Nacional de la Industria de Reuniones, analizó frente a Torruco dicha problemática en los siguientes términos:
“(Es una) realidad que los participantes de la Industria de Reuniones hemos enfrentado y tratado de sortear durante el mismo periodo.
“Esta información más que una queja o inclusive un posicionamiento es un hecho que juntos, gobierno e iniciativa privada, debemos enfrentar para retomar la senda del crecimiento que al final de cuentas se traducirá en bienestar para una buena parte de los mexicanos”.
Más cortesía no se puede, pero Torruco insiste en que es una situación estacional por la diferencia del mes en que cayó la Semana Santa y repite las cifras alegres, festivas, producto de la comparación, técnicamente imposible, de los datos de Banxico y el INEGI.
Discurso idéntico al que ha pronunciado en las últimas semanas, como si fuera una de esas cartas de ventas a las que un programa de cómputo le cambia automáticamente el nombre del destinatario.
Una hora después Torruco ya está sentado frente a una mesa elegante del hotel Paradisus, con el propio Salazar y otros líderes de la industria.
Allí cuenta anécdotas tediosas del pasado, trata de convencer a los empresarios de lo imposible y califica de ineptos o ladrones a quienes han considerado que su análisis del PIB no se sostiene.
Nadie lo contradice, ni lo rebate. ¿Para qué? Salazar ya está tranquilo por haber cumplido con su deber cívico; así es que lo más inteligente, les parece, es llevar la fiesta en paz y disfrutar de los vinos.
Divisadero
Plataformas digitales. Este miércoles se publicó en el Diario Oficial de la Federación, el anexo tres de modificaciones a la Miscelánea Fiscal.
Se trata de la salida técnica que plantea la Secretaría de Hacienda, cuyo titular es Arturo Herrera, para cobrarle impuestos a los particulares que rentan habitaciones e inmuebles a quienes usan las plataformas digitales como Airbnb.
Dicha salida es coincidente a la que planteó aquel estudio que patrocinó la Asociación Mexicana de Cadenas de Hoteles (AMCH) y que hizo la Facultad de Turismo de la Universidad Anáhuac.
Con las cifras de 2017, dicho trabajo anticipaba una potencial captación fiscal de seis mil 200 millones de pesos, de los cuales tres mil 200 serían a través del IVA.
