Este paradisíaco destino es un pequeño pueblo de pescadores. Su ubicación lo dota de atractivos naturales y cercanía a otras ciudades de la región. Mahahual se localiza a menos de 2 horas de la ciudad de Chetumal, desde donde se puede empezar una exploración a este paraíso de sol y arena.
Uno de los grandes atractivos del lugar son sus aguas cristalinas azul turquesa, su arena prístina y el sol que corona a ambos. La mezcla de todos estos factores más la calidez de la gente hacen de este encantador pueblito un lugar único para disfrutar en familia de todas sus bellezas naturales.
Mahahual además cuenta con el único muelle de cruceros de la zona sur del Caribe Mexicano, desde ahí se puede ver el desfile de barcos que llegan al destino y se pueden tomar panorámicas del sol metiéndose entre las olas.
El pequeño pueblo deslumbra por su encanto y la diversidad de su ecosistema, muestra de ello es que es hogar de la Reserva de la Biósfera Banco Chinchorro, que constituye el atolón coralino más grande de México. En esta reserva es posible admirar un arcoiris de tonalidades formadas por bellísimos corales y los peces de colores que se entremezclan en el oleaje.
A escasos 60 kilómetros de Mahahual se encuentra Xcalak que presume de ser una de las últimas playas vírgenes de México. Xcalak es el escenario perfecto para practicar el buceo y explorar el destino desde sus adentros.
Sin embargo, incluso para la gente que no bucea, la playa permite admirar la gran diversidad natural que ha robado el corazón y llenado las expectativas de todos sus visitantes.
Actualmente Mahahual cuenta con 44 hoteles que se dividen en diferentes categorías para distintos gustos y necesidades. En total el destino ofrece a los viajeros 577 habitaciones que se extienden en una oferta que va desde cabañas y amplios bungalows hasta pequeños hoteles independientes.
