Mantener vacíos o no los asientos de en medio en los aviones para disminuir la posibilidad de un contagio de coronavirus entre pasajeros, se ha convertido en un “tema polémico entre aerolíneas, autoridades aéreas y pasajeros”, afirmó Giancarlo Mulinelli, vicepresidente de ventas globales de Aeroméxico.
Durante su participación en la mesa redonda: “Post Covid-19 ¿Qué sigue?”, donde también participaron Braulio Arsuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), y Carlos Velázquez, columnista y fundador de Periódico Viaje, Mulinelli precisó que no resulta viable mantener asientos vacíos en el avión.
Aunque, reconoció, los pasajeros en todo el mundo exigen el distanciamiento social en los aviones, eso implica bloquear asientos.
UN TUIT LO CAMBIA TODO
Esa exigencia se hizo viral el pasado 9 de mayo, cuando Ethan Weiss, un cardiólogo que voluntariamente apoyaba a pacientes de coronavirus en Nueva York, voló de regreso a su ciudad, San Francisco, el viaje lo hizo por United Airlines.
Por Twitter difundió la fotografía del avión al 100% de su capacidad, y la acompañó de un comentario: “supongo que @united está relajando su política de distanciamiento social en estos días. Cada asiento lleno en este 737”, después continúo escribiendo que esa sería la última vez que volaría en mucho tiempo.
La respuesta de United para Weiss llegó dos días después por el mismo medio: “a partir de la próxima semana, los clientes en vuelos que estén cerca de su capacidad total podrán reservar en un vuelo diferente o recibir un crédito de viaje. Haremos todo lo posible para comunicarnos aproximadamente 24 horas antes de la salida, también brindaremos opciones antes de abordar.
A partir de esa fotografía continúan presentándose más casos en otras aerolíneas, por esas situaciones es que el tema se torna polémico, porque financieramente las compañías no podrán mantener en todos sus vuelos el asiento de en medio desocupado, ya que eso representará más pérdidas de las que ya tienen.
MÁS AFECTACIÓN ECONÓMICA
Mulinelli detalló que eso lo podrán aplicar mientras el vuelo mantenga un factor de ocupación menor al 60%, y eso lo harán a través del booking system, “habrá casos de vuelos llenos y no lo podrán asegurar (el asiento bloqueado)”.
Jorge Baruch, responsable de la Clínica de Atención al Viajero de la UNAM, explicó a Periódico Viaje, que no existe evidencia científica que documente que mientras estaba activa la aviación con la pandemia, se contagiaran entre pasajeros dentro de la cabina del avión.
Aunque sí los hubo entre un pasajero y un sobrecargo, así como entre la tripulación, por eso se estableció el cubrebocas dentro del aeropuerto y antes, durante y después del vuelo.
POR QUÉ NO TE CONTAGIAS EN EL AVIÓN
De acuerdo a las evidencias que existen, Baruch explicó que hay mecanismos a favor para que las personas viajen juntas.
-El sistema de filtrado de aire que es de tipo “flujo laminar”
– Los pasajeros casi no tienen contacto porque están sentados en la misma posición
-Funciona como barrera de protección el asiento de enfrente
-Por la posición de asiento es difícil que los viajeros estén cara a cara
-El viajero usará el cubrebocas todo el tiempo.
La función del cubrebocas es contener las partículas que se expulsen de la nariz y boca porque se quedarán en la superficie interna, así no van a contaminar superficies, ni manos, ni al hablar, detalló.
Para evitar contagios dentro del avión se estableció lo siguiente:
-No viajar enfermo
-Tener horarios de comida restringidos
-Desinfectar continuamente las superficies
-Colocar toallitas desinfectantes a la mano de los pasajeros
-Incrementar barreras entre un asiento y otro.