Tiene rutas históricas, como The Ocean, que opera hace 114 años; sus trenes cuentan con las comodidades para viajes de 19 horas.
La revolución tecnológica en la industria del transporte impulsa a pensar cada vez más en el destino y menos en el trayecto, si se recorren grandes distancias en pocas horas. Aún existe la posibilidad de usar las líneas ferroviarias para conocer vastos territorios y admirar la naturaleza.
Canadá es uno de los países más grandes del mundo y cuenta con una infraestructura para ferrocarriles que la integran más de 12 mil 500 kilómetros de vías, esto le permite al turista viajar de costa a costa de manera cómoda y segura.
Vía Rail es la empresa que tiene a su cargo el transporte de pasajeros por parte del gobierno canadiense y ocupa 73 locomotoras para mover a más de 4.3 millones de pasajeros al año. Además, cuenta con 428 carros de diferentes tipos: pasajeros, dormitorios, comedores, de carga, entre otros.
The Ocean, una de sus rutas históricas, cumple 114 años en este mes de julio. Su recorrido de mil 346 kilómetros de viaje dura 19 horas, comienza en la ciudad de Montreal, Quebec, a las siete de la noche, y termina en el puerto de Halifax, Nueva Escocia, a las seis de la tarde del día siguiente.
Aunque parezcan muchas horas, el tiempo vuela al descansar en una habitación privada. Existen cabinas de dos y cuatro camas en las categorías: Sleeper Plus y Economy class. Cuentan con un baño que es toda una experiencia, es un espacio pequeño que alberga un lavabo con espejo, el inodoro y la regadera. El agua sale por una regadera de teléfono, se puede controlar la temperatura y el tren provee de todo lo necesario para una ducha como lo hace cualquier hotel.
Las áreas comunes ayudan a pasar el rato. Se sirve cena, desayuno y comida en el carro comedor, es recomendable reservar el horario, previo al abordaje. En el menú siempre hay una opción de carne roja o blanca y vegetariano. El Wi-Fi sólo se encuentra en ciertos carros y, en ocasiones, en los lugares muy remotos la señal puede ser intermitente, pero la velocidad del internet para ver y escribir correos o checar redes sociales es suficiente. Además, es gratuito.
Uno de los mejores atractivos es el carro panorámico. Usualmente es el último vagón del tren y en él se puede disfrutar de majestuosas vistas.
CUADRO
- La cabina se transforma de asientos a literas.
- El equipaje permitido depende de la clase, pero hasta dos maletas de 23 kg.
- Viajar con animales es posible, pero deberán documentarse.
