La aviación mexicana enfrenta retos que de afrontarlos generarán oportunidades de negocios para la industria, dijo Peter Cerdá, vicepresidente Regional para las Américas de la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA, por sus siglas en inglés).
En el marco del Primer Foro del Transporte Aéreo convocado por la Cámara Nacional de Aerotransportes (Canaero), Cerdá expuso que los retos a cumplir son la construcción de una infraestructura eficiente, la aplicación de un marco regulatorio moderno y que el próximo presidente de la República juegue un rol activo en esta industria ante el desarrollo económico que genera.
En el panel “Perspectivas de la industria aérea en México y en el mundo”, destacó la necesidad de contar con una infraestructura acorde al crecimiento de la industria en México, ya que en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) se hace un “cuello de botella”.
“Para que México pueda seguir escalando en competitividad global, es necesario que continúe presente el apoyo de un gobierno participativo en las actividades del transporte aéreo”.
Destacó que de cancelar la construcción del nuevo aeropuerto, México perdería su conectividad aérea, y las compañías extranjeras aprovecharían sus rutas, para transportar a sus clientes a la capital mexicana.
“La gente quiere viajar pero en México hay problemas de infraestructura. Si los aviones no pueden aterrizar, los beneficios económicos se quedarán en otros lugares que sí cuenten con las instalaciones adecuadas”.
Sobre la posible concesión del NAIM, agregó que el proceso tendría que hacerse de forma cuidadosa y transparente y recomendó hacerlo sólo hasta que esté operando. “Tenemos que ser un poco cuidadosos con el tema de privatización. Un aeropuerto no es una vaca lechera, el gobierno mexicano debe enfocarse en la construcción”.
