El turismo doméstico se convirtió en una opción de impacto económico inmediato y constante para las economías locales en todo el mundo.
A medida que la pandemia de COVID-19 cambió drásticamente la forma en que viajamos, el turismo doméstico se convirtió en una respuesta lógica y accesible para los viajeros.
En este contexto, Airbnb realizó el reporte “Dispersión del turismo en Latinoamérica” en el que analiza cómo las restricciones a los viajes internacionales, impuestas para frenar la propagación del virus, llevaron a una exploración renovada de destinos nacionales.
De acuerdo al estudio, los viajeros comenzaron a descubrir joyas escondidas y atracciones locales en sus propios países. Aunque la emergencia de COVID-19 ha disminuido en cierta medida, esta tendencia hacia el turismo doméstico continúa ganando impulso.
En el año 2022, las reservas de noches de Airbnb para viajes domésticos en América Latina experimentaron un aumento del 33%, superando el crecimiento del 5% en las reservas de noches para viajeros internacionales.
Este fenómeno se replicó en todos los países de la región, y lo que es más impresionante es que el crecimiento incluso superó los niveles previos a la pandemia, con un aumento del 45% en México, un 60% en Colombia y un casi duplicado en Brasil.
Esta tendencia hacia el turismo doméstico también ha dejado una huella indeleble en el Caribe, una región históricamente conocida como un destino de llegada para viajeros internacionales.
Aquí, las reservas de noches de Airbnb para viajes domésticos aumentaron en un 85% en el año 2022 en comparación con 2019.
Una encuesta realizada por Airbnb a sus huéspedes arrojó luz sobre las razones detrás de esta creciente preferencia por el turismo doméstico.
El 40% de los encuestados mencionaron que la razón principal para utilizar Airbnb fue el ahorro de dinero, lo que Airbnb entiende como la importancia de la accesibilidad económica en la toma de decisiones de viaje.
El 28% expresó un deseo de experimentar la autenticidad local y evitar las zonas turísticas convencionales, lo que refleja una búsqueda de conexiones culturales más genuinas. Además, el 13% valoró la flexibilidad en cuanto a fechas y destinos, lo que destaca la necesidad de adaptabilidad en un mundo en constante cambio.
Los datos revelan una tendencia en constante crecimiento hacia experiencias de viaje locales, impulsadas por la búsqueda de ahorro, autenticidad y flexibilidad.