Será difícil que la Aerolínea del Estado vuele a final de año

 
Redacción
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La Aerolínea del Estado necesita un permiso de COFECE, inversión que no está contemplada en el plan y personal para volar.

Luego de la publicación, por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), de la constitución de la empresa de participación estatal mayoritaria, “Aerolínea del Estado Mexicano”, es necesario llevar a cabo varios procesos para iniciar operaciones, como una solicitud de opinión a la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece), y esto, porque es un requisito para cualquier aerolínea que “vaya a abrir”.



De acuerdo con Pablo Casas Lías, director del Instituto Nacional de Investigaciones Jurídico Aeronáuticas (INIJA), precisó que esto se tiene que hacer, pues al tratarse de una aerolínea de Estado y estar con subsidio, generará una competencia desleal y, probablemente, hasta monopolio de mercado.

En una entrevista, el especialista del sector aeronáutico dijo que será importante que soliciten esta opinión a la Cofece; se tiene que ver si va a volar desde el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), que no haya situaciones ventajosas respecto a las aerolíneas que ya están volando desde ahí.

Opinó que falta ver si los slots que se redujeron en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) se los dan a esta nueva aerolínea.

El director del INIJA comentó que para que la aerolínea estatal comience a operar, requiere, por lo menos, de cien millones de dólares, además de tener los aviones y el personal que la vaya a operar.

Sin embargo, comentó, estos recursos no están contemplados ni en el Plan Nacional de Desarrollo ni en el Presupuesto y Egresos de la Federación (PEF), ya que en el de este año no se autorizó ningún “peso para la creación de ninguna aerolínea, ni para la compra de ningún nombre -marca-”.

Casas Lías descartó que la aerolínea opere para finales de este año, como se ha dicho, debido a que, primero, no hay disponibilidad de aviones, ya que las principales armadoras tienen su lista de espera por lo que no tienen una disponibilidad de entrega inmediata.

Además de que la nueva aerolínea se tiene que afiliar a la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA), a la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI), así como que la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos (FAA, por sus siglas en inglés) para que ésta les dé el visto bueno, si es que operan vuelos hacia ese país.

“Ahí viene la complicación, porque apenas empezaron las juntas para la Categoría 1, entonces no creo que esté para fin de año”, puntualizó.

Con información obtenida de la alianza con A21.



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