La nueva era del turismo supone riesgos y oportunidades, ya que las personas no dejarán de viajar, pero sí se enfocarán más en sus emociones que en la experiencia al momento de elegir destinos, aerolíneas, hoteles y atracciones.
Lo anterior resultó en el informe elaborado por LLYC: “La nueva era del turismo: de la experiencia a las emociones”. Ahí colaboraron Josep Palau, director general de Ideograma; Marissa Gama, investigadora de la Maestría en Gestión de Destinos Turísticos de la Universidad Anáhuac México, y Rodrigo Esponda, director general del Fideicomiso de Turismo de Los Cabos.
Los especialistas consideraron que por la pandemia “el turismo masivo ha muerto”, lo que llevará a nuevos desafíos en su operación, gestión y promoción.
“El turismo ha llegado a un punto de quiebre en su forma de operar y gestionar, no solo por la pandemia sanitaria, también por la digitalización, la era del metaverso y los mundos virtuales. Para ser asertivos en la estrategia turística que demanda el entorno actual, no podemos regresar a prácticas pasadas, es clave mirar hacia adelante y, mejor aún, anticipar nuevos desafíos”, se publicó.
Ante ello, proponen una hoja de ruta en 10 puntos frente a los riesgos y oportunidades del sector:
- Inteligencia de datos para la toma de decisiones
- Buyer persona, o el nuevo viajero
- Experiencia Phygital, el reto de conectar en el mundo físico y virtual
- Desarrollo de la comunidad, la promesa no cumplida
- Sostenibilidad ligada a políticas públicas
- Marca destino con visión a largo plazo
- Transparencia para ganar confianza
- La creciente colaboración pública-privada
- Turismo doméstico en el centro de las prioridades
- Capacidad al talento turístico para impulsar su vocación
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