El tema electoral no afectará las ventas de la industria restaurantera, por el contrario, el primer semestre habrá una sobredemanda, y para el segundo periodo el único tema que podría afectarle sería la inflación.
Para Hugo Vela Reyna, presidente de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac), dijo en entrevista que cuando es un año electoral históricamente tienen una demanda agregada los primeros seis meses del año, por lo que se espera una derrama adicional.
Agregó que de julio a diciembre la demanda será moderada, por lo que se estima un cierre de año de 3% de crecimiento. En 2017, las ventas de los socios de la Canirac aumentaron 2.8 por ciento.
Si bien se espera un crecimiento particularmente mayor, el tema que deberán vigilar los restauranteros y sus proveedores será el índice inflacionario, ya que de acuerdo con el resultado de las elecciones presidenciales se podría elevar, lo que generaría “un efecto inmediato en el consumo”, es decir bajaría el gasto de la población en este rubro, añadió.
Una preocupación de la Canirac, aseveró, es que en los últimos tres años han observado que el número de restaurantes ha crecido por encima del número de comensales, lo que ha llevado a que la venta promedio por restaurante ha disminuya. “Entonces eso afecta en la mortandad de los negocios, y a nosotros nos interesa que los negocios tengan perdurabilidad”, comentó.
La propuesta para que industria y comensales se vean beneficiados tiene dos puntos que detalló Vela Reyna, el primero es reforzar el consumo interno donde la clase media tenga mejores condiciones de ingresos para que puedan gastar en la industria restaurantera, y aumentar el porcentaje de deducibilidad en el consumo de restaurantes que hoy es de 8.75 por ciento.
REPERCUSIONES
Las preferencias de los comensales se modificaron luego de los sismos de septiembre de 2017, se registró una migración de la zona Roma-Condesa al Pedregal de San Ángel, Santa Fe y Polanco.
El presidente de la Canirac comentó que la industria se recuperó de forma rápida, sin embargo, los restaurantes de la zona centro de la Ciudad de México y de las colonias Roma y Condesa están al 75% de la capacidad que mostraban antes del sismo.
“Se ha venido recuperando poco a poco, va a tomar algunos meses en que el consumidor retome la confianza de poder estar en esa zona”, dijo.
La industria en Chiapas, Oaxaca y Cuernavaca no se ha recuperado al 100%, señaló que la demanda continúa baja, aunque no precisó en cuánto.
