No es la primera vez que una línea aérea en el país desaparece por problemas financieros
El pasado 15 de febrero, Aeromar anunció el cese definitivo de todas sus operaciones; sin embargo, no es la única aerolínea que quebró en México.
Aquí te dejamos otros ejemplos de empresas que dejaron de volar por problemas financieros:
Interjet
Inició sus operaciones en 2006 como una de las aerolíneas de bajo costo que comenzaron a surgir como una nueva opción.
Sin embargo, entre 2018 y 2020 la empresa comenzó a tener problemas financieros y esto afectó a usuarios por cancelaciones y retrasos.
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Tras la pandemia de Covid-19, los activos de Interjet se desplomaron, su sindicato inició una huelga en 2021 y de ahí se declaró en bancarrota.
Aviacsa
Fue una de las aerolíneas más importantes de México, pero con la llegada de Volaris e Interjet en 2007, comenzó su declive.
En ese año, la firma chiapaneca tuvo una suspensión por parte de Comunicaciones y Transportes por una deuda de 290 millones de pesos.
La única manera de salvar a Aviacsa era vender la empresa o tener un inversionista, aunque ninguna opción se concretó.
Para 2009, la aerolínea entró a concurso mercantil que finalizó en 2011, entonces reinició la venta de vuelos, pero su deuda con el AICM le impidió seguir operando.
Mexicana
Una de las aerolíneas que más ha dado de qué hablar, ya que desde que dejó de operar en 2010, ahora podría revivir gracias a López Obrador.
En septiembre de ese año, la empresa entró en concurso mercantil para evitar una quiebra, pero hasta 2014 se declaró en bancarrota.
Hasta el momento de su cese definitivo de operaciones, Mexicana era una de las más antiguas e importantes de México.
Las principales causas de su desaparición fueron los malos manejos financieros, costos laborales muy altos y la pandemia de influencia AH1N1.
