El secretario de Seguridad Nacional de Estados Unidos, John Kelly, anunció que se reforzarán las medidas de seguridad en los vuelos procedentes de otros países para evitar extender la prohibición de usar dispositivos electrónicos en los aviones.
Las autoridades estadounidenses exigen un control reforzado de los dispositivos electrónicos y los pasajeros que viajan en los cerca de dos mil vuelos comerciales que llegan a diario a la potencia norteamericana desde 280 aeropuertos en 105 países.
La decisión del departamento de Estados Unidos es una reacción a la información de inteligencia que indica que terroristas estaban trabajando para esconder explosivos en aparatos electrónicos, y prosigue a meses de discusiones sobre extender la prohibición a las computadoras portátiles.
Si no se adopta la estricta revisión solicitada por Estados Unidos, se podría imponer una prohibición a los productos electrónicos en la cabina – o incluso se podrían suspender los vuelos a Estados Unidos, dijo Kelly.
En marzo de este año, el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos anunció que los pasajeros que volaran a ese país desde 10 aeropuertos en Medio Oriente y África del Norte, no podían llevar aparatos electrónicos más grandes que un teléfono móvil en la cabina.
Ahora las aerolíneas estarán obligadas a instalar detectores de explosivos mejorados, entre otras medidas de control para pasajeros y equipaje que tendrán que cumplir en el plazo máximo de 120 días.
Entre los controles de seguridad estarán: mejorar el control general de pasajeros, llevar a cabo una detección más rigurosa de dispositivos electrónicos personales, aumentar los protocolos de seguridad alrededor de las aeronaves y en las áreas de pasajeros, implementar tecnología avanzada, ampliar la detección con perros y establecer ubicaciones adicionales de preautorización.