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La tienda de cuatro pisos pretende ser un entorno totalmente sensorial dedicado a tostar y envasar café Starbucks Reserve
Chicago, Illinois. A pesar de que en la mañana del 15 de noviembre se sentía un frío de casi menos cuatro grados centígrados que calaba los huesos, la gente se arremolinaba en una larga fila a la espera de que el Starbucks más grande del mundo abriera sus puertas por primera vez en el corazón de Chicago.
No faltó quien desde las seis de la mañana ocupó su lugar en la esquina de Erie y Michigan, para ser de los primeros en entrar al nuevo local de cuatro pisos de esta empresa que ha hecho historia en el consumo de café.
Aunque ahora el Chicago Starbucks Roastery pretende ser un entorno totalmente sensorial dedicado a tostar y envasar sus cafés Starbucks Reserve de todo el mundo.
Un espacio interactivo diseñado para que los clientes vivan la experiencia del café en una forma artesanal con múltiples métodos de preparación, bebidas especiales de reserva y mixología.
Resulta casi incomprensible la fascinación que esta marca despierta en la gente aficionada a esta bebida, ya que a pocas semanas de su apertura las filas siguen siendo interminables y se espera que sigan llegando miles de personas, lo cual podría significar una derrama económica importante para la tienda que incluye un sinfín de monerías como tazas, termos y uno que otro souvenir.
Del horno a la boca
Un detalle extra del nuevo Starbucks es que incluirá bizcochería horneada en el local, autoría del panadero italiano Rocco Princi, conocido por sus panes artesanales creados con recetas familiares tradicionales. La comida artesanal de Princi combina a la perfección con el café Reserve, en desayuno, comida o cena en todos los Starbucks Reserve Roastery que han abierto en otras partes del mundo.
Con la apertura del sexto Roastery del mundo en Chicago, la franquicia pretende superar en lujo al recientemente inaugurado Tokyo Reserve Roastery, aunado a las cafeterías en Seattle, Shangai, Nueva York, Milán, en una especie de competencia por superarse a si mismos.
