Cena de altura en Guanajuato

 
Margarita Solís
hrs.

Con 10 años de existencia y de origen belga, Dinner in the Sky es una creación de Stefan Kerkhofs, quien a su vez también fue el creador del concepto del reality show Fear Factor, donde se ponía a prueba la valentía y el miedo de cada uno de sus participantes. El éxito de este producto ha hecho que haya tocado cerca de 40 países y México no ha sido la excepción.



Hasta el próximo 28 de agosto, la empresa estará presente en la región de Sangre de Cristo en Guanajuato para que a una altura de 45 metros se disfruten platillos gourmet.

Quienes decidan conocer Dinner in the Sky, tienen la posibilidad de elegir entre cuatro opciones: desayuno, brunch, comida y cena. En el caso del desayuno y comida, el menú está compuesto en tres tiempos y estos incluyen el vino de la casa y agua.

**Más cerca del cielo**

Ubicado en las inmediaciones del hotel boutique Exhacienda Jesús María, con más de 200 años de historia, hay un punto donde una enorme grúa amarilla es custodiada por el staff que da la bienvenida y alienta a los visitantes a aventurarse en esta comida a más de dos mil 400 metros sobre el nivel del mar.

Una vez sentado en alguna de las sillas, los viajeros son asegurados con correas, lo que proporciona la seguridad suficiente para esta experiencia. La mesa con una capacidad para 22 personas, está sujeta a un cable de acero que es sostenido por la grúa, es la encargada de suspender a los comensales, con un conteo previo y con el ánimo que brindan los miembros del equipo de Dinner in the Sky, los pies de los visitantes se despegan del piso hasta alcanzar la elevación final.

Una vez en lo alto, se aprecia una vista de 360 grados, donde por un lado se observan los viñedos de Caminos D´Vinos y, por el otro, las inmediaciones de la exhacienda. El viento es el encargado de ofrecer las panorámicas, esto al hacer girar la mesa que está próxima a recibir los alimentos gourmet y el vino que llenará las copas de los asistentes.

Entre risas y bromas todos los comensales no dejan de mirar a su alrededor, aunque la lluvia amenace con su presencia, el techo que cubre el complejo asegura que no se obstaculice la experiencia.

Tras una hora de estancia en las alturas, la grúa hace descender la mesa y los comensales con decenas de fotografía en sus dispositivos móviles, aseguran que volverán a experimentar esto.



hrs.

Periodista con más de 20 años de experiencia en los sectores relacionados con finanzas, economía, negocios y comercio. Entre el mundo impreso y el digital.

Notas relacionadas
Ir a la barra de herramientas