Por su ubicación, Colima ofrece a los visitantes una mezcla entre el mar, que forma parte del océano Pacífico, y una serie de cadenas montañosas que enmarcan la extensión del territorio.
El estado pone a disposición de los visitantes diversas opciones que se ajustan a itinerarios multifacéticos. Como punto de partida, es preciso empezar con Manzanillo.
Manzanillo es uno de los lugares que más atrae. La multiplicidad de sus playas permite que a poco tiempo de distancia se encuentren espacios de arena dorada que se baña con el azul del mar, olas que rompen con piedras blancas y, por supuesto, las montañas que observan desde lo alto.
Estas playas se abren a los viajeros no sólo para que descansen al borde o sobre sus aguas, sino para que las exploren a bordo de un kayak, para realizar pesca deportiva, para hacer snorkel o incluso para bucear.
Otro de los grandes atractivos de todo el estado son sus varias experiencias ecoturísticas. Colima cuenta, además de sus actividades de playa, con un sinnúmero de espacios abiertos para conectar con la naturaleza y respirarla en completa armonía.
La posición geográfica del estado permite conocerlo a través de sus ríos, montañas y volcanes. Todos estos acompañados por un clima cálido que persiste durante todo el año.
Para experiencias terrestres, el Parque Nacional Nevado de Colima se abre como un oasis que, como su nombre lo indica, se motea de nieve. Para quienes quieran disfrutar de sus inmediaciones es recomendable hacerlo acampando, en rutas a pie o en bicicleta.
El Nevado de Colima tiene como vecino al Volcán de Colima, montaña que no sólo iguala en magnificencia a las que están a su alrededor sino que constituye también el hogar de un volcán que todavía está activo.
Si de cultura se trata, el estado ofrece varias opciones para visitar. Se puede partir de sus zonas arqueológicas entre las que destacan El Chanal y la Campana. En la capital se encuentran, entre otros atractivos, el Teatro Hidalgo o el Palacio de Gobierno.
Y no se puede hablar de cultura sin mencionar el Pueblo Mágico de Comala. Que lleva el mismo nombre que el pueblo de la obra cumbre de Juan Rulfo e ícono de la literatura mexicana: Pedro Páramo.
Dentro de los variados atractivos del estado también vale la pena mencionar su oferta para los aficionados al golf que encontrarán en el territorio tres campos de golf de talla mundial que han sido escenario para torneos profesionales de índole internacional.
Para cerrar, la gastronomía de Colima también se impregna de su geografía. Por lo que ofrece platillos de mar y tierra con ingredientes endémicos que enamoran el paladar de sus visitantes.
